Una de las dudas habituales en torno a todas las redes sociales tiene que ver con la cantidad y la calidad de los seguidores, y su influencia sobre los resultados finales. Relacionado con ello, también, el hecho de si comprar seguidores o cultivarlos únicamente de forma orgánica representará una diferencia sustancial sobre los mismos resultados.
Una duda tan vieja como lo son las propias redes sociales, pero que en el último tiempo cada vez hay más pruebas y datos al respecto, lo que permite saber si efectivamente comprar seguidores Instagram es una decisión excelente, como siempre suele afirmarse, o si hay que tener en cuenta otros tantos elementos para que la estrategia funcione.
Ventajas de comprar seguidores en Instagram
Tener mayor número de seguidores hace ganar notoriedad en la plataforma. Ideal para cuando se está comenzando, donde los avances pueden llegar a ser muy lentos. Pero también, en pleno auge de la cultura de los influencers, mientras más seguidores se tenga, mayores oportunidades de colaboración, de ser sugerido a otros perfiles similares o leads interesados en su temática, se harán aparecer.
En una cuestión más detallada, hay algunas ventajas interesantes que se derivan de esta práctica cada vez más segura y habitual:
- Seguidores iniciales: cuando se crea una cuenta, se tienen 0 seguidores. Al cabo de unos meses o hasta de un año, llegar a la centena se hace difícil. En cambio, si se tienen 1.000 o 2.000 seguidores de base, conseguir los siguientes miles se hará más fácil que pasar de 0 a 100.
- Complemento: si se tiene buen engagement en el perfil, en cuanto a visualizaciones e interacciones -comentarios, Me Gusta-, mejorar la cantidad de seguidores hará que el perfil sea aún más destacado por la plataforma, y, si se quiere, más rentable para la utilización del perfil para promociones y colaboraciones.
- Números brutos: aunque cada vez tiene incidencia el número de comentarios y Me Gusta -que también pueden ser adquiridos en plataformas especializadas-, el número bruto de la cantidad de seguidores es un elemento distintivo de la calidad de los perfiles. Además, los usuarios tienden a seguir a las cuentas con buena cantidad de seguidores, antes que una que apenas tiene algo más de 100.
La manera correcta de tomar esta decisión
Aunque se haya convertido en una práctica habitual, incluso por influencers mundialmente conocidos o marcas gigantescas, hacerlo de la manera correcta es lo único que permitirá aprovechar todas las ventajas. De lo contrario, los efectos pueden ser totalmente opuestos.
- Sitios seguros: hay sitios como Comprar-Seguidores.info donde la calidad de los perfiles, la geolocalización, la duración de estos seguidores y otras variables pueden ser constatadas antes de proceder a una compra. Eso implica mayor seguridad, no tener cientos de perfiles de lugares dispares y que no guardan relación con la ubicación de su perfil, y por supuesto, tener seguridad de que funcionará.
- Equilibrio: un perfil con 100 seguidores orgánicos y 10.000 seguidores de este tipo es una muy mala idea. Sin embargo, un perfil con 1.000 seguidores orgánicos y 1.000 seguidores de este tipo significa tener un perfil de alta calidad, con muy buena atención de la audiencia y con mayor potencial numérico para destacar en la plataforma.
- Estrategia: se ha convertido en una práctica habitual, y no por ello es una compra de una única vez. Conforme el perfil vaya creciendo, generando interés y siendo más provechoso para la audiencia, utilizar esta clase de servicios puede ir en consonancia con el número de seguidores actuales y los nuevos hitos buscados, en un proceso continuo de mejoramiento de la estrategia, pero donde el fin último -generar calidad con el contenido- no debe perderse en procura de únicamente tener más números que la competencia directa.
Instagram es hoy una de las redes sociales donde destacar es más importante. Algunas empresas y emprendedores basan su trabajo diario en esta red, y por ello competir desde la ventaja de los números es fundamental. Hacerlo bien es aún más importante.